Todo debe ser contado al menos una vez, aunque como había dictaminado un escritor con su autoridad literaria, deba ser contado según los tiempos, Javier Marías.

lunes, 31 de octubre de 2011

Infoxicación

El término infoxicación hace referencia a la sobresaturación de información. Esta definición debería hacernos reflexionar sobre la cantidad de desinformación indirigible existente en la red, que no es sino ruido informativo. Nuestro objeto como periodistas debería centrarse en la búsqueda del origen de dicha desinformación, que en gran parte se debe al intrusismo en la profesión periodística y a la libertad de publicar en la red cualquier contenido independientemente de su fiabilidad. Y es que este privilegio y esta libertad es lo que ha provocado gran parte del ruido informativo, impidiéndonos ver toda aquella información relevante a nuestra búsqueda.

Por consecuente, surge la necesidad de una formación personal para esquivar todos esos hándicaps que puedan impedir cada una de nuestras búsquedas, sobre todo en una profesión como la nuestra. Una vez hemos encontrado el problema (la infoxicación), debemos intentar ponerle remedio. Y la única posibilidad de hacerlo es con una formación concerniente a documentación, que nos haga sortear el ruido informativo y no caer en la tentación del silencio informativo. Una formación que nos haga distinguir toda aquella comunicación fiable de aquella que carece absolutamente de valor; a distinguir toda aquella información que carezca de autor y fecha de creación para no caer en el anonimato y en la posible falsedad de dichos datos. Una formación que, ante todo, me ayude a traducir en información todos los datos que pueda extraer de la red sin acabar produciendo más infoxicación como si de un círculo vicioso de tratase.

Como dijo Joseph Pulitzer, “la única profesión del mundo para la que no se necesita formación alguna es la de idiota; para todo lo demás hay que estudiar”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario